Definición
Los formularios ofrecen a las personas usuarias la posibilidad de introducir datos con el objetivo de recoger los mismos de una manera estructurada para facilitar la obtención de información o realizar una transacción. Ejemplos de esta funcionalidad son los formularios de contacto, de inscripción en actividades, encuestas y simuladores.
Composición
Las páginas de formularios se componen de:
- Cabecera y menú
- Rastro de migas
- Título
- Descripción inicial (opcional): Permite incluir una descripción inicial formulario en la que se presente el mismo al usuario.
- Cuerpo del formulario: Contiene los distintos campos en los que el usuario puede rellenar y el botón de acción.
- Información adicional (opcional): Recoge información sobre el destino de los datos introducidos, cláusulas legales...
- Pie de página
En el cuerpo del formulario pueden insertarse los siguientes tipos de campos:
- Entradas de campo
- Campos y áreas de texto
- Campos numéricos
- Campos de fecha
- Campos de subida de ficheros
- Campos de contraseña
- Controles de selección
- Campos autocompletados
- Radio buttons
- Selectores
- Checkboxes
Pautas de uso
El formulario debe contener únicamente los campos imprescindibles para la prestación del servicio. Por lo tanto, antes de añadir un campo es necesario valorar:
- Por qué la información solicitada es necesaria para la prestación del servicio.
- Qué destino tendrán los datos introducidos. Si se almacenarán, cómo se mantendrán seguros y qué medidas se tomarán para cumplir la legislación vigente en materia de datos personales.
- Qué personas suministrarán la información.
- Qué mecanismos se usarán para comprobar que la información es correcta.
Al organizar un formulario, se deben priorizar aquellos campos que son más relevantes para la prestación del servicio. En el caso de que sólo ciertos usuarios deban introducir ciertos datos, se deben utilizar técnicas de ramificación de manera que los campos no se muestren a todos los usuarios. Es necesario monitorizar la actividad en el formulario a través de herramientas de analítica, con el objetivo de detectar interacciones no completadas y puntos de fuga de usuarios, y poder actuar en consecuencia.
Si la complejidad del formulario lo requiere, puede extenderse a varias páginas. En ese caso, es necesario ir autoalmacenando la información introducida por el usuario en cada paso de manera que no se pierda. En el caso de que un formulario se extienda a través de varias páginas, debe mostrarse al usuario un indicador de avance y las páginas deben mantener una coherencia temática en las cuestiones planteadas.
Los formularios deben ser navegables usando únicamente el teclado.
Cada campo debe ir en una línea independiente. La única excepción son los campos íntimamente relacionados entre sí (p.ej. nombre y apellidos), que sí pueden compartir línea en función del ancho de la pantalla.
Se recomienda que al validar si el contenido de un campo es formalmente correcto (p.ej. un e-mail), se muestre una indicación indicando que es correcto (en verde) o no (en rojo, con advertencia) en el momento en el que pierda el foco. El aviso de no haber rellenado un campo obligatorio sólo debe realizarse una vez que el usuario ha tratado de realizar la acción (p.ej. enviar).
Bocetos
Escritorio
Móvil
